MI AMOR DE VERANO

MILDRED

Despierto con mucha energía, bajo de mi cama, voy a la ducha y tomo un baño de agua fría para que se me quite la pereza. Me visto con rapidez y sonrío al espejo.

Estoy muy emocionada.

Hoy empiezo mi último año de escuela, al fin voy a graduarme. Ya parezco el intro de alguna película o serie de Disney. Me siento Demi Lovato en el inicio de Camp Rock.

Rio de mis propias ocurrencias, escucho que teléfono suena y contesto.

—Estoy afuera Mil — respondo un ok y bajo

Me despido de mi madre y salgo de casa, saludo a Taty mi mejor amiga y ella comienza a manejar hacia la escuela.

— ¿Como te fue en las vacaciones? —cuestiona sin despegar la vista de la carretera

No es que no hayamos tenido contacto en este verano, de hecho, hablábamos casi todos los días, pero la verdad sé a que se refiere.

Sonrío al recordar mis vacaciones, la cabaña. el sol, la arena, el mar... Y a él.

Mi amor de verano.

— Increíble— respondo ocultando a mi chico — Llegué ayer a las once de la noche por eso no te escribí, dejé todo preparado para hoy y caí rendida — ella asiente

—Igual yo, solo que llegamos hace dos horas y no he dormido — reímos —¿Y cómo fue su despedida? — pregunta de nuevo y es ahí donde le cuento todo

Una vez que termino de contarle ya hemos llegado a la escuela, pero nos quedamos en el auto habla y habla de nuestros veranos sin importar que ya nos lo hayamos dicho todo, es asi que nos sorprende el sonido del timbre y prácticamente corremos lejos del auto.

Este es mi primer día y lo aprovechare.

Con mamá nos cambiamos de ciudad, ya que abrió una sucursal aquí y como es la dueña debe cerciorarse que todo marche perfectamente bien y así aprovechamos para yo graduarme, ya que es mi último año.

Camino lentamente siguiendo a mi amiga por los pasillos, mirando todo a mi alrededor y amando esta escuela cada vez más y más, admito que me sorprende, cuando miro al frente es muy tarde. Taty no sé por dónde se metió y hay un cuerpo que choca con el mío y caigo prácticamente sentada al suelo.

—Maldita sea — exclamo

A este sí que lo insulto

Alzo la mirada y me sorprendo al ver quién es. Su expresión esta mezclada, refleja confusión, asombro y hasta creo que se quedó sin palabras, yo debo de verme igual porque no entiendo que hace aquí.

Nos despedimos sin saber que nos veríamos solo días después en la misma escuela y de esta manera, de haberlo sabido lo habría buscado antes para venir juntos y así comenzar el año con él. Pero el destino parece que quiere sorprenderme este año, porque ante mi esta la última persona que imaginé ver.

Es él, mi chico... Mi amor de verano

Me levanta lentamente del suelo sin dejar de mirarnos a los ojos.

Esto debe ser una jodida broma.

Agarro mi bolso y no sé qué decir, solo lo miro e inmediatamente recuerdos de este verano vienen a mi mente.

— ¿Mil? - su voz me hace mirarlo — ¿Qué... qué haces aquí? — pregunta sonriendo de lado

Wow. Esa sonrisa me mata.

— Mamá abrirá aquí una nueva sucursal y me matriculó en esta escuela, no sabía que tú estabas aquí —

— Es increíble — susurra y se acerca a mí, sus ojos me hipnotizan — ¿Sabes? Te busqué en la cabaña al día siguiente, me moría de ganas por hacer algo —

— ¿Qué cosa? — pregunto

— Besarte — sonrío y el me imita

Poco a poco empieza a acercarse a mí, mi corazón late frenéticamente de un segundo a otro, siento mis manos sudar y cierro los ojos. Había extrañado mucho este beso.

— Esto lo había esperado mucho, créeme — asiento de acuerdo a lo que dice y coloco mis manos en su cuello, siento su respiración muy cerca de la mía

Al fin...

— ¿Taylor? — escucho la voz de una chica, miro a mi derecha y una chica pelirroja se acerca mirándome

— Mi amor — agarra la nuca de Taylor y estampa un beso en sus labios.

¿Qué sucede aquí?

Enseguida siento ganas de pedir explicaciones. Taylor y yo fuimos novios durante el verano, que acabó ayer, nosotros nos despedimos hace solo 4 días y no creo que en esos días haya conseguido una novia, ¿O sí?

Sé que Taylor y yo no éramos más novios, rompimos ya que jamás nos volveríamos a ver, pero tampoco imagine que esto sucedería.

— Hola — miró a la pelirroja que me ha saludado — ¿Quién eres? — pregunta

— Ella es Mildred — habla Taylor — Solo es, la chica nueva —

¿La chica nueva? ¿Sólo eso?

Auch.

Miró a Taylor a los ojos, esperando su característica sonrisa malvada y un guiño para decir que esto es una broma y presentarme como la chica a la que conoció en el verano, pero noto que está incómodo.

¿Qué diablos le pasa?

¿Qué está sucediendo aquí?

— Si, soy yo. La chica nueva — le doy otra mirada a Taylor, esperando que hable, que diga algo, pero no lo hace — ¿Tu eres? —  pregunto a la pelirroja y ella sonríe

—Soy Samantha Coffey — estira su mano y la acepto

— Un gusto a ambos — una última mirada a Taylor que mira a otro lado — Bueno, adiós — y me alejo

Voy a clase y pido disculpas por llegar tarde, como soy nueva entienden mi retraso y luego de presentarme tomo asiento atrás. En toda la jornada trato de no pensar en cómo reaccionó Taylor y solo me concentro en lo que dicen los maestros.

No dejaré que un chico me distraiga de mis estudios.

Una vez que llego al estacionamiento busco el auto de Taty, ella me pregunta que paso y decido omitir el encuentro con Taylor y Samantha, asi que le digo que las clases fueron aburridas y me lleva a casa.

No puedo creer lo que Taylor dijo, soy la chica nueva nada más, lo que pasó entre nosotros no fue nada para él. Cuando llego a mi habitación, me tiro a la cama y recuerdo el día que lo conocí.

" — Mamá está cabaña es increíble — digo mirando alrededor

— Qué bueno que te gusta mi amor — sonríe y comenzamos a sacar todo cuando terminamos decido conocer el lugar

El mar me encanta. El sol, la arena, el agua, todo es increíble.

Tengo un hambre atroz así que me acerco a un puesto de magdalenas y compro una con una gaseosa, me siento frente al mar a comerlas, pero de repente noto que un chico me está mirando.

Genial. Ya vamos a empezar con esto.

Han pasado varios minutos, ya he terminado de comer y ese chico no me quita la mirada de encima. Me levanto y comienzo a caminar hacia la cabaña, mientras camino noto que me está siguiendo.

— ¿Qué? — preguntó cruzando mis brazos —¿Por qué me estas siguiendo? —

Se detiene y me mira — Me gustan tus zapatos — sonríe, bajo mi mirada y los veo

—  Si, son hermosos. Todo en mi lo es...¿Eres un acosador o qué? — él solo me mira, harta de esto me giro para seguir caminando y noto que él me sigue de nuevo pero esta vez se para a mi lado, maldigo

— ¿Ahora qué? — pregunto

— Ten una cita conmigo — dice parándose frente a mi

— ¿Y porque yo haría eso? —

— Porque soy guapo, inteligente y divertido y además porque eres nueva aquí y es mi deber invitarte para que conozcas el lugar —

— Eso tal vez te funcione con alguna chica, pero conmigo no. No soy idiota y no vine a esta playa a buscar novio, ni mucho menos, así que rechazo tu invitación — mi respuesta lo sorprende — Ya conoceré el lugar sola. Ya sabes lo que dicen... Mejor sola que mal acompañada - sonrío y comienzo a caminar de nuevo

Se lo que piensan estos chicos al ver a la nueva. Quieren conquistarla hasta llevarla a la cama y tener un estúpido romance de verano para después decirle que lo suyo no puede seguir y dejarla y como la chica se ha enamorado queda con el corazón roto.

No vine aquí para un romance, ni para s*x*; peor para un corazón roto.

— Hagamos algo — la voz del chico me sorprende

— ¿Que no te había dejado atrás? — pregunto mirándolo

—  Si adivino lo que piensas sales conmigo — dice

— No te das por vencido, ¿eh? — alza las cejas divertido

— Soy muy persistente —

— Adelante, adivina. Aunque no creo que lo logres — sonrío con victoria

Por unos segundos me queda mirando igualmente y yo a él. Noto que es bastante guapo. Alto, fornido, cabello negro peinado para atrás, nariz puntiaguda, labios que te invitan a besarlos, morderlos, chuparlos, lamerlos y otras cosas más... Y esos ojos, unos ojos claros acompañados de una mirada muy penetrante e hipnotizante.

— Lo que piensas es... — su voz me hace aterrizar — Que como eres nueva aquí quiero conquistarte hasta que tengamos s*x* o un romance de verano para después yo dejarte porque lo nuestro no puede ser ya que vivimos en dos lugares diferentes. Entonces como tú te has enamorado de mi queda con el corazón roto... ¿Adiviné? — cuando termina de hablar noto que está muy cerca, todo este tiempo me había perdido en esa mirada

— ¿Que? — aclaro mi garganta — No... No, claro que no — digo

— Mientes — se acerca más — Esta noche, a las 8, nos vemos en la playa junto a la estatua de la sirena — su perfume llega a mis fosas nasales, él sonríe y comienza a caminar alejándose, pero se detiene y me mira — Por cierto, me llamo Taylor — y sin más se aleja dejándome anonadada.

Tengo una cita. "

Sonrío al recordarlo, ese fue el inicio de un romance de verano.

Bienvenidos a esta nueva historia.

Gracias por leer este capitulo.No olviden que estoy en redes sociales como Genemua.Libros y en mis historias destacadas encontrarán a los personajes como yo me los imagino.Espero se puedan pasar por ellas y disfrutar de estos personajes.Nos leemos despues.

MIL

Han pasado tres días desde que fue mi encuentro con Taylor, no lo he visto, no he sabido nada de él y aunque me trato mal la última vez no puedo negar que me preocupa, lo cual odio en el fondo de mi corazón. Sé que es patético que me preocupe por alguien que prácticamente fingió no conocerme en frente de lo que creo era su novia.

Soy una estúpida.

Llego a mi último día de clase en esta semana y salgo del aula para poder ir a casa cuando noto a lo lejos un chico alto, con el cabello para atrás, hablando entre un grupo de personas.

¿Taylor?

Hoy si vino.

Comienzo a caminar en su dirección, él alza la vista y choca con la mía, las comisuras de sus labios se alzan un poco y me muestra esa sonrisa pícara y coqueta que me vuelve loca, eso me da valor para acercarme y conversar, así que sin pensarlo dos veces camino en su dirección y llego al grupo de personas y todos me miran.

Uhmm... Tal