Naths

¿Cómo sigo existiendo cuando mi corazón está tan astillado?, tan destrozado que su pulso me suprime - esto me pregunto todos los días de mi larga e insípida existencia. Si Estoy…, destrozado. ¿Cómo continuo?, cuando cada respiración no es más que miles de espadas filosas que atraviesan mi desdichada alma, si vivir para mí se ha convertido en un insidioso recordatorio haciéndome recordar una y otra vez que perdí la parte más importante de mi mismo. Mi compañera…, la mitad de mi alma. Y ya ninguna cantidad de distracción puede sacarme de la tortura, de la pérdida de mi vida. "Miserable" eso me siento ser, muchos creen que lo tengo todo, pero en realidad mis manos están más que vacías.

Pasó de ser una simple ama de casa a convertirse en la esposa de un mafioso. Ignacia era una mujer afortunada; había nacido en una familia acaudalada y siempre había vivido rodeada de lujos y comodidades. Contrajo matrimonio con el hombre de sus sueños, un empresario con el que tuvo dos hijos. Sin embargo, su vida cambió drásticamente cuando su esposo decidió abandonarla y dejarla en la calle con sus hijos. Ignacia no estaba acostumbrada a la pobreza, pero tuvo que aprender a sobrevivir con muy poco. Trabajaba largas jornadas en empleos mal remunerados para poder pagar el alquiler y poner comida en la mesa. A pesar de las adversidades, nunca perdió la esperanza y luchó incansablemente por proporcionarles a sus hijos una vida digna. Pero su suerte empeoró cuando descubrió que un hombre muy influyente le exigía que se casara con él para saldar una deuda que sus padres habían contraído con él. Lo que Ignacia desconocía es que ese hombre era un antiguo conocido suyo, alguien a quien ella había humillado y lastimado en el pasado, y que ahora estaba sediento de venganza. A pesar de la resistencia inicial de Ignacia, finalmente se vio obligada a aceptar la propuesta del hombre influyente para poder mantener a sus hijos. Pero lo que ambos ignoraban era que compartían un secreto, un error del pasado que había dejado una huella indeleble en sus vidas.